El exterior vs el interior de Aries
No es ninguna novedad que cada uno de nosotros tiene una faceta que le muestra al mundo… y otra muy privada que no le muestra a nadie. Pero ¿qué pasaría si te dijéramos que lo que exhibes con orgullo y lo que escondes con vergüenza depende de tu signo del zodiaco?Si te interesa indagar sobre predicciones y aspectos generales sobre los signos, te invitamos a recorrer un portal más que muy completo acerca de ellos: el horóscopo diario. Una vez que lo explores, ya no tendrás la misma visión acerca de las personas de tu entorno. Saber qué los motiva y a qué le tienen miedo es el primer paso para aprender a comprenderlas.
En esta oportunidad te damos la bienvenida a conocer los aspectos que conforman la dualidad de un signo que parece muy sencillo… pero cuya apariencia engaña.
Lo que Aries exterioriza – la cara que te muestra
• Entusiasmo: no pasa un momento del día sin que los arianos demuestren esa alegría de vivir que tanto los caracteriza. El mero hecho de vivir parece hacerles sentir unas tremendas ganas de enfrentarse al mundo y metérselo en su bolsillo. Son conquistadores natos y su actitud ante la vida es responsable de la mayoría de sus éxitos.
• Muchos bríos: lejos de sentir temor a los cambios o a enfrentarse a nuevos desafíos, los Aries están cargados de coraje. Sus bríos son tan potentes que con una simple mirada se le abren puertas que para la mayoría están selladas.
• Autosuficiencia: parecen no necesitar ayuda para absolutamente nada. Pueden con su vida y con la de todos los demás. Sin embargo, no suelen cargarse responsabilidades ajenas al hombro. Ante esto, deberíamos preguntarnos si es que realmente pueden con todo o simplemente es una máscara de la que se sirven para esconder ciertas carencias de su personalidad.
Lo que Aries esconde – la cara que te oculta
• Miedo a estancarse: se embarcan en un proyecto detrás de otro porque les aterra quedarse estancados en un solo lugar. La estabilidad les sabe a cárcel, así que buscan cambiar de forma permanente las condiciones que lo rodean.
• Agresividad: hay mucha agresividad contenida en los nativos de este signo. Si los observamos caminar, hablar y desenvolverse en la vida, notaremos que no piden permiso para invadir terrenos ajenos. Ellos se sienten dueños y señores del suelo que pisan, y lo reclamarán con los medios que hagan falta.
• Dominancia: no invitan, sino que obligan. Son nativos que esperan que hagas lo que ellos quieren, pero que no te lo pedirán con amabilidad. Aries impone su voluntad de una forma que parece que estuviera brindándote las mejores condiciones para tu realización personal. Sin embargo, lo que persigue es su propio beneficio y muy poco le importa tu bienestar. Si aún te queda alguna duda, prueba declinar uno de sus ofrecimientos, y verás cómo se lanza sobre tu yugular para obligarte a aceptar. Puedes estar seguro que si te ha ofrecido algo, es que sacará su buena tajada cuando finalmente accedas hacer lo que su voluntad manda.